Los cadáveres exquisitos se corresponden con técnicas
pictóricas que surgieron en 1925 de mano de los surrealistas. Esta técnica está
basada en un antiguo juego de mesa llamado “Consecuencias”, en el cual los
jugadores escribían por turnos en una hoja de papel, que más tarde doblaban y
la pasaban al siguiente jugador para que aportara su colaboración. Debido al auge de esta
técnica, otros campos del saber, como la Literatura, se hicieron eco de ella y no
tardaron mucho tiempo en utilizarla.
Son muchas las
posibilidades que nos ofrece este recurso en el aula, ya que podemos
trasladarlos a varias áreas didácticas, nos permite dirigir actividades orientadas a grupos o puede funcionar como warming-up. Uno de los motivos por lo que se han llevado a cabo cadáveres exquisitos en clase, es por otorgarle a la escritura un carácter menos formal y estático. Somos capaces de realizar trabajos en grupo sin necesidad del consenso, y este es un ejemplo. Cada persona aporta un trocito suyo y con la totalidad de aportaciones se obtiene un producto que no tiene por qué tener sentido ni coherencia. En este caso, el procedimiento de la actividad fue el siguiente:
• Primero, se dispuso una serie de folios y se hicieron dobleces.
• Después, se repartió un folio por cada fila de alumnos, los cuales debían escribir lo primero que se les pasara por la cabeza en el doblez que le correspondiera.
• Más tarde, los niños y niñas, cuando hubieran escrito su frase, realizaron un doblez al folio y lo pasaron a su compañero más cercano.
• Finalmente, cuando todos los cadáveres exquisitos estuvieron terminados, se leyeron en voz alta.
Cabe destacar que tras realizar esta actividad, dio comienzo la que se encuentra en la siguiente entrada del blog. Dicha tarea nos sirvió para desarrollar un cuento oral de forma improvisada, a modo de cadáver exquisito. Una vez que los niños consolidaron este término, no les costó en absoluto llevar a cabo un cuento de forma improvisada. En cuanto a los resultados de esta actividad, resaltar los siguientes ejemplos:
• Primero, se dispuso una serie de folios y se hicieron dobleces.
• Después, se repartió un folio por cada fila de alumnos, los cuales debían escribir lo primero que se les pasara por la cabeza en el doblez que le correspondiera.
• Más tarde, los niños y niñas, cuando hubieran escrito su frase, realizaron un doblez al folio y lo pasaron a su compañero más cercano.
• Finalmente, cuando todos los cadáveres exquisitos estuvieron terminados, se leyeron en voz alta.
Cabe destacar que tras realizar esta actividad, dio comienzo la que se encuentra en la siguiente entrada del blog. Dicha tarea nos sirvió para desarrollar un cuento oral de forma improvisada, a modo de cadáver exquisito. Una vez que los niños consolidaron este término, no les costó en absoluto llevar a cabo un cuento de forma improvisada. En cuanto a los resultados de esta actividad, resaltar los siguientes ejemplos:
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